(…)
Hoy es un día importante para todos los fans siscarianos, pues hoy 7 de mayo es el cumpleaños de nuestra amadísima Lara
¿Os acordáis de cuando lo confesó en “Asuntos Públicos” a cuenta del cumpleaños del contertulio Julio César Herrero días antes…?
Hace poco asistimos con gozo a su fugaz “reentré” cuando se apareció a un grupo de votantes en un colegio electoral
Pocos días antes (en la noche del 24 al 25 de abril) como si de una premonición se tratase tuve con ella un sueño lúcido y romántico que a falta de material nuevo preparado (como os dije antes, estoy en ello) voy a compartir con vosotros
Por afición estoy acostumbrado a escribir historias, así que lo de contar sueños no tiene para mí nada de particular salvo que no dejan de ser cosas un poquito personales
Pero como esta historia es muy bonita, como me figuro que cada cual tiene los suyos con Lara y/o con otras, y como de los sueños salieron no pocas obras maestras de las artes, allá voy. Está narrado en primera persona para que cada cual se sienta el protagonista, y como el relato me salió un poco largo irá en dos partes. La primera ahora y el desenlace dentro de unos días. Y sí, hay escenas de sexo
pero la historia es ante todo romántica.
Dedicado con todo mi cariño a nuestra Duquesa de Gandía, una de mis musas más queridas y admiradas
con un abrazo fraternal a sus enamorados fans.
>>>>>>>>>>>>>>>>>>>Soy una especie de relaciones públicas, algo así como un “enlace” que facilita el contacto entre empresas, instituciones, directivos, etc. Es un buen trabajo, bien pagado y en el que se conoce a mucha gente. La aventura comienza cuando después de varios trabajos previos me destinan definitivamente a la sección cultural de RTVE. Mi misión desde hoy es la de avisar al museo tal o a la editorial cual de que va en camino un redactor y un cámara de TVE hacia allí y que los traten bien, y ocuparme de los invitados o entrevistados. He tenido mucha suerte al recalar aquí, ya que me va a permitir conocer a muchos personajes de la cultura (escritores, cineastas, pintores, etc…) muchos de los cuales admiro, de la mano de varios periodistas conocidos de la casa como… Lara Siscar
Cuando me presentan a Lara no quepo en mí de gozo. No pierdo la ocasión de decirle que soy un gran admirador suyo, que es una gran comunicadora y que no me explico que no tenga programa propio en TV después de su trabajo en “Asuntos Públicos”, “Atención Obras” o en los telediarios (por ponerle ejemplos) Pero cuando ella abre los ojos como platos con interés es cuando le hablo de sus libros, de lo que me han gustado y sobre detalles de las tramas o los personajes. Ella me respondió muy animosa
“me caes bien, será un placer trabajar juntos a partir de ahora”. Desde ese día suelo acompañarla a los reportajes y las entrevistas. Las primeras semanas alternando con otros colegas, y desde los dos meses o así ya casi en exclusiva con Lara y su troupe de cámaras, técnicos y demás pues al parecer la propia Lara me pidió como auxiliar fijo tras las primeras experiencias positivas
Congeniamos muy bien, realmente bien. En muy poco tiempo nos hacemos no solo buenos compañeros sino buenos amigos. Me introduce en su círculo de amistades y hablamos hasta de nuestras cuitas familiares con toda naturalidad, como si nos conociéramos de toda la vida. Descubro que es, efectivamente, tal y como se intuye de sus apariciones más espontáneas en TV y en su grafología. Muy inteligente, culta y trabajadora, muy correcta y educada, talentosa, afectuosa… Al natural es la Belleza en persona y siempre va impecable, tiene un estilazo… Toda una joya de mujer, vamos
Pasamos mucho tiempo juntos a diario, y cuando toca ese raro día que no nos vemos nos queda la reunión de la “pandilla” en la cafetería de abajo al terminar la jornada. Sin querer, cada día digo o hago algo que la hace reír. A veces, a carcajadas
Alguna foto, para que no os aburráis. Aquí está guapísima, y se asemeja mucho a la imagen de Lara en este sueño, con melena larga, chaqueta y demás… Tu debes estar registrado para ver los links.
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Login Suelo darle los buenos días por gestos porque casi siempre la pillo en su mesa hablando por teléfono a primera hora
Me quedo embobado mirándola mientras habla y a la vez me sonríe o me guiña un ojo. Qué pena que ahora sea todo por móvil porque seguro que es de las que le daba vueltas con el dedo al cordel del fijo (adorable) No hace falta decir que en apenas unos días trabajando a su lado he pasado de admirarla a estar perdidamente enamorado de ella
Sé que está soltera tras romper hace meses con su última pareja (el tal Antonio Lucas o quien sea) pero no sé si está abierta a recibir ofertas. Y me consta que no soy su único pretendiente por aquí. ¿Me declaro o no? La quiero de verdad y me muero por ella pero me da corte, y temo que me rechace. Me da miedo que dé el paso y se lo tome mal (¿quién sabe lo que pasa a veces por la cabeza de las chicas?) Y luego está el tema del acosador, de cómo lo haya superado o no… Pero nos llevamos tan bien que me da esperanzas… Al despedirnos siempre pienso
“mañana se lo digo…”. A la mañana siguiente llego y pienso
“hoy no…” Pasa el tiempo y Larita sigue sola, siendo objeto de deseo de media redacción mientras suspiro por ella en secreto. Llega la primavera y empiezo a ver a moscardones de máquina de café revoloteando a su alrededor a los que les ríe las gracias, sin prestarles interés pero sin espantarles. Algunos le lanzan el anzuelo cada día, los muy pesados. La idea de que me van a levantar la chica de mis sueños delante de mis narices me hace decidirme. Una buena mañana, solos en un momento de intimidad mientras el entrevistado de turno se retrasa, venzo mi miedo al rechazo y mi timidez y me declaro con pocas palabras. Algo así como:
“Lara, he de decirte… Estoy enamorado de ti” Lara no me habla pero me lo dice todo. Durante esos eternos segundos de silencio me mira sin pestañear, con mucha dulzura pero como quien no termina de creerse lo que acaba de oír. Con una mueca contiene su sonrisa y cuando al fin toma aire para responderme espero un
“¡Ay, tontorrón…!”. En cuatro cariñosas y educadas frases me desarma. Me dice que esperaba este momento desde que me conoció. Sabe desde el principio que estoy colado por ella y que mis sentimientos son nobles y sinceros
Dice que yo también le gusto y que se siente halagada por mi interés… pero no quiere que me ilusione con ella
No quiere arriesgar nuestra amistad y nuestra buena relación laboral por un “affaire” que puede acabar con ambas. Dice que me quiere muchísimo, pero como amigo. Y me dice que lo mejor para mí es que me busque otra chica, que seguro que hay otra estupenda esperándome ahí fuera. Me da un abrazo, dos besos y una caricia en la mejilla como quien te dice “no puede ser”
Sé que me guardará el secreto y que seguiremos tan amigos pero esa noche regreso a casa destrozado. No soy capaz ni de mirarla en foto porque me echo a llorar. Descorazonado y avergonzado, pienso por instinto en poner tierra de por medio. Solicito a mis superiores el cambio a otro destino pero me lo deniegan
Ellos están muy contentos con mi trabajo y a su vez RTVE me considera un activo muy valioso que no quiere perder ya que les he abierto muchas puertas con mis contactos. En estas, otros colegas de Lara (Carlos del Amor o los de “Días de Cine”, por ejemplo) solicitan mis servicios, y debido a ello Lara y yo no nos vemos el pelo durante dos o tres semanas. Puede que ella también me esté evitando porque cuando me vuelvo hacia su mesa, nunca está
Pienso que es el triste fin de mi historia de amor siscariana. Pero el destino teje y teje sus hilos y la novela sigue…
Un pequeño respiro, llegados a este punto lo necesitamos… Tu debes estar registrado para ver los links.
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Login Al cabo de unas tres semanas Lara y yo volvemos a trabajar juntos para una arriesgada misión: un comité de huelga universitaria ha impedido una conferencia de un escritor Premio Cervantes o similar, tomando la facultad como si fuera el motín de la “Celda 211”
Sin tiempo para explicaciones personales después de tanto tiempo sin vernos subimos al coche y allá que nos vamos. El ambiente es muy tenso y Lara entrevista a unos y a otros mirando de reojo a los lados por si va a aparecer algún estudiante enfurecido con ganas de bronca. Con varios periodistas de distintas emisoras reunidos en el hall haciendo su trabajo, de pronto ocurre lo que nos temíamos. Irrumpe un piquete con varios manifestantes furiosos que nos echan poco menos que a patadas. Algunos plumillas se hacen los valientes y empiezan las peleas. En un arrebato me voy a defender a unos redactores a los que están apaleando delante de mí. En ese mismo momento huyen corriendo el cámara y los técnicos dejando a Lara literalmente a merced de unos chiflados armados con palos y barrotes. Cuando me doy la vuelta, Lara está acorralada contra la pared por tres o cuatro “matones”
Con uno de ellos levantando ya el brazo con el barrote para pegarle corro hacia ella y consigo ponerme delante en el último momento. Al verme de pronto, el tipo se detiene y el muy sinvergüenza, con una desfachatez increíble me dice
“Aparta, que le voy a hacer otra cara a tu amiguita”. Quieto como una estatua, sin alzar la voz pero clavándole la mirada en la suya, le respondo
“por encima de mi cadáver” Por unos segundos todos permanecemos inmóviles a la espera de que aquel loco me sacuda con el palo.
“Nene, despídete de tu cara”, pienso. Tras un instante que se hace eterno, el tío se da media vuelta cagándose en todo para acompañar a sus compañeros de horda que han salido del hall hacia la calle para volcar contenedores
Conmigo todavía como una estatua, echando rayos por los ojos pero muerto de miedo por dentro, Lara me toma de la mano y echa a correr.
“Vámonos”. Corremos al coche y una vez sentados se hace el silencio. Lara jadea nerviosa mirando al suelo y solo reacciona para agarrar su móvil y llamar a la redacción. Tan nerviosa como furiosa, le dice al que le habla que no quiere ver nunca más al cámara y a los técnicos que la han dejado tirada, que los despidan ya
Después, otro instante de silencio hasta que, aparentemente más calmada, se vuelve hacia mí y me dice
“No tengo palabras para agradecerte lo que acabas de hacer”. Solo me sale responderle
“Volvería a hacerlo”. Cuando por fin parece recobrar la calma y arranca el coche, añade
“Recuérdame que te debo una cena” (¿Le dará Lara una oportunidad a nuestro enamorado protagonista? ¿Triunfará el amor? ¿Se interpondrá una tercera persona?... En el próximo capítulo, el desenlace.)